Noche de novatos.

Uno de los integrantes del equipo de gotcha con el que juego, preparó el día de ayer en la tarde noche, un juego con novatos; yo invité a varios compañeros del trabajo que primero respondieron muy efusivos que sí iban.

Ayer por la mañana les recordé que era el día del juego de mi equipo con los novatos, que irían más de veinte personas y que resultaría muy entretenido. Finalmente acudieron dos compañeros, el resto se excusó con que se habían olvidado o que el dinero no les alcanzaba.

El juego resultó entretenido, aunque para mí resultó un poco complicado debido a una rinitis, por lo que durante los juegos, la careta se empañaba y me dificultaba la visión, así que no resultaba de mucha ayuda, ya que las jugadas fueron nocturnas y la iluminación afecta o ayuda dependiendo de la posición en el campo.

Primero se les dió una explicación de las reglas del juego, las medidas de seguridad y se realizaron dos jugadas donde participaron exclusivamente los novatos. Posteriormente, nos integramos para disfrutar un rato de sano y seguro esparcimiento.

Todo estaba transcurriendo sin problemas, hasta que uno de los novatos tuvo la idea de usar como protección una sección de un autobús que se encuentra en medio de uno de los escenarios del campo.

El resultado fue una herida en la cabeza, profunda, "escandalosa" por la cantidad de sangre que se derramó en su playera, mientras explicaba que había usado el autobús como protección, que se agacho y cuando se paró lo hizo muy rápido y no vió con que se golpeó tan fuerte.

Lo siguiente que recuerda es el dolor del golpe y la sangre corriendo por su cabeza hacia su rostro y por el cuello, así que cuando los demás jugadores notaron su situación, suspendieron el juego .

Uno de mis compañeros de trabajo se ofreció a llevarlos a los primeros auxilios, sin embargo el novato decidió que prefería ir a una institutción privada para que lo atendieran.

Así finalizó la noche que previo al accidente del novato se había desarrollado sin problemas, espero que el novato se encuentre bien, y que el resto de las personas que asistieron no se queden con la impresión de que el juego "per se", es peligroso.

Gracias a los compañeros que se ofrecieron a fungir como árbitros y fotógrafos en los juegos.